Clavada en el horizonte
su mirada en las estrellas
viajando a la distancia
alas abiertas en el cielo
Su cuerpo prisionero
convicciones la condenan
innovadora a destiempo
sentenciada por pionera.
Libre albedrío
atrapado entre rejas
lucha interminable
su alma vuela en libertad.
ホセ
Modelo: Catalina Vega / Foto: José Carrasco
Aquella, etérea y férrea... no puede encadenarse; el alma no entiende de barrotes, nada, puede detener su vuelo…
ResponderEliminarBellos versos, querido amigo. Y la fotografía muy buena…
Bsoss enormes, y feliz tarde.
Esas almas que vuelan y vuelan sin descanso mi querida amiga. Gracias por tu huella.
EliminarBesos!
Quién no se ha sentido así??? alma atrapada en un tiempo lleno de condiciones y reglas... y dos ventanas por donde se escapa en vuelo libre... al soñar, siempre al soñar.
ResponderEliminarUn placer volverte a leer, amigo José.
Mil besitos y feliz tarde.
Todos nos hemos sentido prisioneros alguna vez Ana María, pero soy un creyente que si las veces que nos sentimos libres son más, entonces ha valido la pena.
EliminarUn gran beso!
Difícilmente el alma se hace presa...
ResponderEliminarUn saludo :-)
El alma nunca es prisionera Mag, la puedes encadenar o poner tras de rejas, pero siempre se escapará.
EliminarUn placer verte por aqui :)
Un bellísimo poema, donde el alma brilla y se libera a pesar de sentirse muchas veces atrapada.
ResponderEliminarUn placer!