Mirando el horizonte
sintiendo el agua
al ser surcada
por la quilla.
Cual Tritón en tierra
añorando aquellos días...
Un hechizo lo ancló
a la tierra que dejaba
en aventura diaria
rumbo al fin del mundo.
Delfines por amigos
y por novia una Sirena...
En busca
de su amada
sus velas ceñirá,
el hechizo romperá.
La brisa del otoño
presagia el temporal...
A la deriva
ambos flotan
abrazados
hasta el fin
Libres como peces
eternamente serán...
ホセ
Ese mar inmenso y bello que hipnotiza e invita a su danza y oleaje… Ése, que de pronto es monstruo que te engulle sin contemplación…
ResponderEliminarBellos y sentidos versos, José… Siempre un placer visitarte
Mil Bsoss!!
Así es el mar y, así y todo siempre me ha atraído.
EliminarGracias por tu huella Ginebra.
Besos.