17 de abril de 2017

Más alla del horizonte




En tierra sus maderas se resecan bajo los rayos del sol de cada día que pasa.

Aquel que fue rey de las mareas, hoy se ha convertido en un espectador más de la inmensidad del mar.

La nostalgia lo invade. Solo las gaviotas que se posan sobre el logran recordarle su glorioso pasado.

Cada invierno que pasa, la lluvia rejuvenece su casco y le hace sentir vivo nuevamente, hasta que las nubes se apartan y el sol se hace presente.

Fue un invierno cualquiera. Las nubes abrieron su compuerta y dejaron fluir todas aquellas lagrimas contenidas por años de observarlo prisionero de su destino.

Tal era la intensidad de aquella tormenta que el agua corría imparable desde los cerros al mar, arrastrando todo a su paso.

El agua de los cielos le hizo despertar. El caudal corriendo a su lado le remecía y recordaba su época de gloria en que remontaba las fieras olas del mar de invierno.

Se sintió vivo nuevamente. No quería abrir los ojos por temor a despertar de un sueño, pero la sensación era tan real que no pudo evitarlo.

Estaba oscuro, no sabía donde estaba ni con que rumbo navegaba. Sin embargo reconoció sin un ápice de duda la salobre caricia en su proa.

Sin pensarlo, enfrentó al viento y la marea apasionadamente, sintiéndose renacer mientras remontaba aquella pared de agua que en su juventud habría evitado.

Sus velas tersas vibraban, su quilla brillaba mientras el crujir de las maderas se confundía con un grito de felicidad y el romper de la ola.

Al día siguiente, solo quedaban en tierra las amarras que lo mantuvieron prisionero por tanto tiempo, como mudo testigo de su imponente viaje, más allá del horizonte.

ホセ

6 comentarios:

  1. Hermosa liberación y apasionante despertar! Izar las velas y navegar; navegar hacia nuevos y maravillosos horizontes…

    Precioso, querido amigo.

    Bsoss miles.

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    1. Tal vez un anhelo después de tanto tiempo anclado a nuestros lastres...

      Gracias por tu visita Ginebra.

      Besos!!!

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  2. A veces el sentimiento es tan fuerte.
    Un placer, amigo mío.

    Mil besitos.

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    1. A veces me sorprendo de cuan certera es tu lectura Ana. Este es uno de aquellos textos en que las emociones brotaban e inundaban sin control.

      Un gran beso!

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  3. Zarpó en busca de la luz que solo hay en el sentir de una llanura abisal.

    Un abrazo de luz ☆

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    1. Zarpó en busca de un mundo mejor, no importa donde ni cuando, solo lo hizo.

      Un gran abrazo!

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