23 de octubre de 2015

De unicornios y otras yerbas



Todo el mundo dice haber visto un unicornio alguna vez en su vida. Claro está, en circunstancias muchas veces complejas de reproducir e incluso muchas veces difíciles de reconocer.

Todos, a excepción de Silvio, aseguran que este ser mitológico brilla con la fuerza de mil soles y sus crines son más blancos que la nieve virgen de los Himalayas. 

Están todos locos, incluso Silvio, porque el verdadero Unicornio es en realidad un Equinus Azabachis Negruzcus y según los últimos estudios de la Real Academia de Mitología Urbana (RAMU) este ser, al nacer es de color unicornio. Si el lector no conoce este matiz de la paleta cromática, lo puede consultar en cualquier guía Pantone, incluso en internet.

El tema es que con el tiempo y la falta de aseo, el unicornio se va oscureciendo debido a la constante acumulación de desechos, más conocido como mugre, haciendo que el bicho en cuestión se oscurezca.

Como es posible dirán ustedes... Bueno, los desafío, la próxima vez que vean un unicornio, deténganse a darle un baño y lo comprobarán.

Respecto al cuerno, todos los estudios apuntan a que se trata de infidelidad grado uno.

Y pensar que todavía existe gente que piensa que los unicornios son blancos.....


ホセ








1 comentario:

  1. Me encanta Jose!

    No me digas que en realidad los unicornios son Equinus Azabachis Negruzcus. Ohhhh.... pensaba que eran blancos... ilusa de mí!

    Besos!

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